Durante la jornada de hoy, el secretario de Programación Económica, Gabriel Rubinstein, se reunió con algunos de los principales referentes económicos de Juntos por el Cambio y les propuso aprobar un presupuesto sin déficit primario como política de estado.
El argumento que sostiene Rubinstein es que, si bien endeudarse en dólares supone un riesgo mayor a endeudarse en pesos, el Estado debería lograr de la forma más rápida posible un superávit fiscal primario para dejar de endeudarse tanto en moneda local como extranjera. El déficit primario que prevé el Presupuesto 2023 aprobado por el Congreso es del 1,9% del PBI, medio punto por debajo del rojo de 2,4% de 2022.
Cabe destacar que además, durante la jornada de ayer, el viceministro de Economía, instó al principal frente opositor a que “cambien de discurso” tras las reiteradas críticas respecto del endeudamiento del Gobierno y que en caso de ganar las elecciones, bajo ninguna circunstancia piensan reperfilar la deuda en pesos para diluir los vencimientos de 2023 entre 2025 y 2030 “a baja tasa de interés”.
Fuente: CORTA
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