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Milei reafirma su objetivo de un tratado de libre comercio con EE.UU.: desafíos y el futuro del Mercosur en juego

  • Foto del escritor: Alejo Saggin
    Alejo Saggin
  • 21 ene
  • 3 Min. de lectura

El presidente de Argentina, Javier Milei, reiteró este lunes su intención de firmar un tratado de libre comercio con Estados Unidos en el transcurso de este año, en el marco de una charla con empresarios durante su gira por Norteamérica, que coincide con la asunción de Donald Trump. Sin embargo, analistas señalan que este acuerdo podría significar la salida de Argentina del Mercosur, además de que enfrentaría varios obstáculos debido a las políticas proteccionistas de la administración de Trump y la falta de complementariedad entre ambas economías.

El regreso de Donald Trump al poder genera expectativas en el Gobierno argentino, que en su primer año de gestión adoptó una política exterior alineada estrechamente con Estados Unidos. Aunque las políticas proteccionistas de Trump no coinciden completamente con los ideales liberales de Milei, el Gobierno argentino espera que la afinidad ideológica y el apoyo mostrado por el presidente argentino al republicano se traduzcan en beneficios para el país.

A pesar de los desafíos globales, como los altos aranceles, la inflación internacional, el fortalecimiento del dólar y la guerra comercial, Argentina tiene objetivos claros para su relación con Estados Unidos, entre los que destacan la búsqueda de apoyo frente al Fondo Monetario Internacional (FMI) y la firma de un tratado de libre comercio.

En cuanto al FMI, la estrategia de Argentina es clara: obtener un desembolso de fondos superior a los casi 45.000 millones de dólares que actualmente debe al organismo, y hacerlo rápidamente y con condiciones mínimas. Si bien algunos miembros del equipo económico critican las políticas cambiarias, hay consenso en que una intervención directa de la Casa Blanca podría desbloquear la situación.

A finales del año pasado, Milei sorprendió al anunciar su intención de negociar un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos, algo que consideró debía haberse hecho hace 19 años. Durante su visita a ese país, reiteró este objetivo en una reunión con empresarios. Sin embargo, algunos analistas dudan de la viabilidad de tal acuerdo. El exembajador argentino en Estados Unidos, Jorge Argüello, señaló que Trump podría priorizar la producción nacional y recordó que durante su mandato anterior, Trump suspendió la importación de biodiesel argentino, lo que significó una pérdida significativa para el país.

El analista internacional Patricio Giusto también opinó que las economías de ambos países no son complementarias, lo que dificultaría los beneficios de un tratado de libre comercio. Giusto sugirió que, en cambio, las inversiones podrían representar un campo más prometedor de colaboración mutua.

Otro aspecto destacado por los expertos es la ausencia de estudios de factibilidad que respalden un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos. Además, avanzar en una negociación de este tipo podría implicar la ruptura con el Mercosur, lo cual requeriría la aprobación del Congreso argentino.

Por otro lado, el exembajador Diego Guelar sugirió que el Mercosur podría ser una plataforma útil para negociar un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos. Según Guelar, aprovechar la presidencia pro tempore del bloque para relanzar la propuesta de 1992 podría hacer que el acuerdo fuera más atractivo para Estados Unidos debido a la extensión y la cantidad de habitantes del Mercosur. A pesar de las amenazas de aranceles de Trump, Guelar considera que un enfoque global podría hacer más viable la expansión comercial desde un bloque.

El diplomático también señaló que Argentina no está aprovechando al máximo el Mercosur y advirtió que el principal problema del país no son los mercados, sino la falta de una oferta exportable adecuada.

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